El Pais, Espana
November 16, 2004

Una exposicion reune la obra fotografica del cineasta Don Askarian

ISRAEL PUNZANO

Barcelona

Imagenes llenas de lirismo. La exposicion Una mirada particular reune
en la sede barcelonesa del Circulo de Lectores (Travessera de Gracia,
45-47) una treintena de fotografias realizadas por el director de
cine armenio Don Askarian. La exposicion, una de las actividades
paralelas de Festival de Cine Independiente de Barcelona, se podra
ver hasta el proximo viernes. Desnudos femeninos inspirados en la
poesia erotica de la Edad Media, paisajes melancolicos y apartes en
los rodajes de sus peliculas son algunos motivos recurrentes en el
imaginario fotografico del cineasta. “Empece con la fotografia antes
de hacerme director de cine. Mi padre conquisto Berlin con el
Ejercito Rojo y trajo un monton de camaras fotograficas alemanas”,
explico ayer Askarian en la presentacion de Una mirada particular. Y
anadio: “Si la comparamos con el cine, la fotografia es una
disciplina mas cercana. Una actividad solitaria y tranquila. Mi
fotografo favorito es Henri Cartier-Bresson”.

El director repaso su biografia para ilustrar una concepcion del cine
alejada de frivolidades y de corses comerciales. “Naci en 1949 en
Stepnakert, capital de la provincia autonoma de Nagorni-Karabaj, que
por entonces pertenecia a Azerbaiyan. Por tanto, creci bajo el
dominio de la Union Sovietica. Aquel era un ambiente muy provinciano
y opresivo. La historia de la URSS era pura propaganda, algo
ridiculo”.

Harto de tanta manipulacion, Askarian aposto por peliculas
comprometidas que recuperaran la memoria historica de su pais. Entre
estos ejercicios destaca el filme Komitas, su obra maestra. “Komitas
era un compositor que padecio el genocidio perpetrado en 1915 por los
turcos contra los armenios. La matanza se inicio con la liquidacion
de la elite intelectual. Los masacraron a casi todos. Komitas logro
salvarse y acabo en un hospital parisiense con graves secuelas
mentales. Cuando le dieron el alta en 1922, no quiso salir de la
clinica y permanecio alli hasta su muerte, acaecida en 1937. Su
historia es la del pueblo armenio. Por eso dedique la pelicula a los
dos millones de victimas de este genocidio”, afirmo el cineasta,
quien puede hablar del exilio en primera persona. “En 1975 me
metieron en la carcel. Me habia declarado insumiso. Me pase dos anos
en prision. Luego emigre a Berlin occidental”, recordo.

De aquella experiencia nacio el compromiso de su filmografia. El
director anuncio que en la actualidad trabaja en dos proyectos: un
documental y una pelicula titulada San Lazaro. “En esta pelicula
planteo de nuevo las mismas preguntas de siempre: Que es identidad?,
que significa el exilio?”.