Turquia no tiene quien le alpauda

El Periódico de Catalunya
12 dic. 2004

TURQUÍA NO TIENE QUIEN LE APLAUDA

CARLOS Elordi

A medida que se acerca la cumbre que habrá de fijar posiciones, el
debate en torno a la entrada de Turquía en la Unión Europea ocupa
cada vez más espacio en las secciones de opinión de los diarios y
semanarios serios de nuestro continente. Y si algo se deduce de unas
y otras aportaciones es que son pocos, aunque a la cabeza de ellos
figuren nada menos que Chirac y Schröder, los partidarios firmes, sin
ambages, del sí. Muchos otros ponen pegas, matizan, proponen
retrasos. Y unos cuantos se oponen abiertamente a la idea.

Rudolph Scharping, exministro y expresidente del partido
socialdemócrata alemán, lo ha dicho muy claro en LE FIGARO: “No hay
duda alguna de que en el actual estado de cosas, Turquía no está en
condiciones de convertirse en miembro de la UE. Aunque ese país haya
llevado a cabo progresos sorprendentes y en plazos muy cortos, aún
sigue muy lejos del objetivo: la sociedad civil dista mucho de ser
estable; Turquía no asume la totalidad de su historia, y
concretamente el genocidio armenio. No están garantizados los
derechos de la mujer. Los ciudadanos turcos siguen siendo el mayor
colectivo de refugiados políticos en Alemania. Habrá que esperar
muchos años y algunos conflictos para ver si el control civil sobre
los militares y la prohibición de la tortura son pilares reales y
aceptados de una democracia fundada en un verdadero estado de
derecho”.

En un debate que ha publicado LE NOUVEL OBSERVATEUR, Daniel Cohn
Bendit, actual portaestandarte del europeísmo más entusiasta, ha
defendido una postura (más o menos la de “veamos que ocurre y
decidamos luego”) que, si no fuera porque se argumenta con
reflexiones fundadas, podría ser calificada de frívola. “Yo estoy por
la apertura de negociaciones, sin que por ello sepa cómo van a
terminar. En el actual estadio de nuestra historia debemos intentar
el milagro del Bósforo sin saber si se producirá. Al final del
periodo de prueba, no será la adecuación de las legislaciones lo que
nos permitirá confirmar que existe una comunidad de valores y que
podemos llevar a cabo la ampliación, sino la evolución global del
nivel de vida, la actitud hacia la religión, la laicidad, la
condición de la mujer. …”. Concluye con pragmatismo: En definitiva,
si dentro de diez años Turquía se convierte en ‘La Meca de la
democracia’, con un Islam secularizado de forma democrática, la
integración no sólo sería posible, sino deseable. Negarse a esa
perspectiva sería hacer el juego a los islamistas radicales”.
A más corto plazo, parece que Europa no tendrá más remedio que
resolver el contencioso que él éxito de ventas de los aviones Airbus
ha generado con los Estados Unidos. Porque si hasta LOS ANGELES
TIMES, tal vez el más anti-Bush de los grandes diarios
norteamericanos, se ha desmelenado en sus ataques a Bruselas con tal
motivo, hay que suponer que el ambiente está que arde en aquel lado
del océano: “Las relaciones transatlánticas, actualmente deterioradas
por el conflicto e Irak, pueden empeorar significativamente si EEUU y
la UE no resuelven su más importante disputa comercial. Los altos
subsidios con los que los gobiernos europeos apoyan al Airbus en su
competición con Boeing violan las leyes comerciales internacionales.
El gobierno Bush hace bien presionando a los europeos”, ha escrito el
gran diario californiano.